por encima del rito del vínculo,
más allá del juego siniestro
de la soledad y la compañía.
Un amor que no necesite regreso,
pero tampoco partida.
Un amor no sometido
a los fogonazos de ir y de volver,
de estar despiertos o dormidos,
de llamar o callar.
Un amor para estar juntos
o para no estarlo,
pero también para todas las posiciones intermedias.
Un amor como abrir los ojos.
Y quizás también como cerrarlos.
(En: Quinta Poesía Vertical)
pero tampoco partida.
Un amor no sometido
a los fogonazos de ir y de volver,
de estar despiertos o dormidos,
de llamar o callar.
Un amor para estar juntos
o para no estarlo,
pero también para todas las posiciones intermedias.
Un amor como abrir los ojos.
Y quizás también como cerrarlos.
(En: Quinta Poesía Vertical)
1 comentario:
Un amor incondicional,
que no necesita regresar ni partir,
pero que por no poner condiciones,
no dejará de amar a aquellos seres, secretamente admirados por él,
aunque lo hayan golpeado.
Continuación escrita espontáneamente por Admirador secreto
Publicar un comentario